Los padres deben ser los primeros en educar a sus hijos en materia sexual. Sepa por qué.
La sexualidad no debería ser un tabú en el hogar. Lo ideal es que padres e hijos dialoguen sobre este tema de manera franca, a fin de que estén bien instruidos y evitar que obtengan información distorsionada de otras fuentes.
“Las primeras conversaciones sobre sexualidad podrían empezar a partir de los 11 años. Es una edad referencial, ojo, ya que puede ser antes o después. Eso está en función de la psicología de cada niño y del medio en el que se desenvuelve”, asegura Liliana Tuñoque, psicóloga de la clínica Internacional.
Tuñoque plantea cuatro grandes temas que un adolescentes de 14 o 15 años ya debería conocer gracias a sus padres: *las diferencias sexuales entre hombre y mujer; la reproducción sexual propiamente dicha; los métodos anticonceptivos; y las enfermedades de transmisión sexual. *
En el diálogo se debe poner énfasis en los valores morales y emplear los términos correctos, sin diminutivos. Tampoco hay que saturar de información, solo brindar lo indispensable. Asimismo, en el ambiente donde se produce el diálogo debe primar la seriedad y la confianza. “Hablar de sexo no equivale a incentivarlos para que tengan relaciones. No. Simplemente, se trata de brindarles herramientas para que actúen con responsabilidad”, asegura Tuñoque.